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Turrón de chocolate negro (sin azúcar) con quinoa, frambuesas y nueces


3 min

La Navidad… esa época maravillosa llena de emoción, luces, colores…y ... dulces. Muchos, pero que muchos, dulces.

Bastante tenemos ya con nuestra montaña rusa hormonal como para que, encima, sumemos un suplicio más por no poder probar bocado. necesitamos un poquito de tregua, ¿no? 

Y como nuestro papel es ponerte las cosas fáciles y de color de rosa (o del color que más te guste), hoy te hemos preparado este turrón de chocolate negro con quinoa, frambuesas y nueces que, no solo te va a alegrar las Navidades con su sabor de escándalo, sino que encima está cargadito de beneficios para esta nueva etapa de nuestra vida. ¿Preparada? Toma nota, es muy sencillo de hacer.

Chocolate negro: Antioxidantes al poder


Ya lo hemos dicho en otras ocasiones… Viva el chocolate negro. ¿El motivo? Porque además de estar de locos, es una auténtica fuente de antioxidantes , los cuales nos ayudan a combatir el estrés oxidativo y favorecer la salud cardiovascular.

Además, contiene magnesio , ese mineral fundamental en la menopausia que nos ayuda a mitigar el insomnio, refuerza la salud ósea y reduce la ansiedad gracias a su capacidad para estimular la producción de serotonina.

Eso sí, recuerda que, cuanto más puro (mínimo de 85% de cacao), ¡mejor que mejor!

Quinoa hinchada: Un crujiente aliado cargado de nutrientes


Otro componente de este turrón que nos encanta es la quinoa hinchada. Y es que no solo aporta textura y ese irresistible “crunch”, sino que también es una fuente excepcional de:

⚫️ Proteínas completas: ideales para el mantenimiento de nuestra masa muscular.

⚫️ Fibra: regula nuestro tránsito intestinal.

⚫️ Minerales esenciales: como hierro y zinc, que nos ayudan a combatir la fatiga y a fortalecer el sistema inmunológico.

Otro punto a su favor es su bajo índice glucémico y su perfil nutricional equilibrado, lo que la convierte en un ingrediente esencial para mantener el peso bajo control.

Frambuesa deshidratada: El toque ácido y un “extra”de antioxidantes


La frambuesa deshidratada no está ahí solo por su delicioso sabor ácido y dulce.

Estas pequeñas joyas rojas deberían ser un “must” en nuestros menús al estar repletitas de:

⚫️ Vitamina C: nos ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y a mejorar la absorción de hierro.

⚫️ Fitoquímicos: como los polifenoles, esenciales para reducir la inflamación y a nuestros queridos sofocos.

⚫️ Fibra soluble: no solo beneficia la digestión, sino también ayuda a regular los niveles de colesterol.

⚫️ Antocianinas: poderosos antioxidantes que favorecen nuestra salud cardiovascular y cerebral.

Al ritmo de las nueces: Un superalimento que no falla


Ya sabemos que los frutos secos son grandes aliados en nuestra alimentación (en porciones moderadas, como todo en esta vida).

⚫️ Y las nueces son un claro ejemplo de ello. Y es que este fruto seco de forma peculiar es una fuente estupenda de ácidos grasos Omega 3, ayudándonos a reducir la inflamación y protegiendo nuestra salud cardiovascular.

⚫️ Además, nos proporcionan una antioxidante clave para mejorar la salud de nuestra piel: la vitamina E. Y, como no, no podía faltar ese chute de magnesio para nuestros huesos y para combatir la ansiedad que, en esta época, ya sabemos que toda ayudita es buena.

Y ahora si… Llega la hora de ponernos MANOS A LA OBRA:


⚫️ Derretir tu tableta de chocolate favorita (nosotras hemos optado por un chocolate del 85%: cuánto más alto el % del cacao más saludable será el chocolate). Puedes hacerlo al micro o al baño maría, mezclando con un poco de aceite de coco o sin nada.

⚫️ Cuando esté derretido, incorpora la quinoa hinchada y las nueces troceadas al gusto. En este caso, más es más.

⚫️ Remueve hasta que la mezcla quede homogénea y espolvorea por encima las frambuesas deshidratadas troceadas. También puedes añadir un poco de sal como toque final.

⚫️ Vierte en un molde y extiende para que te quede con un grosor de 1-2 cm (puede ser un molde específico para chocolate o el que más te guste).

⚫️ Mételo en la nevera hasta que se solidifique (un par de horas mínimo), y si te entran las prisas, unos 20 min en el congelador.

Y solo con estos pasos, ya tendrías listo un turrón de 10 para que estas Navidades no falte el dulce mientras te cuidas como nadie 😉

¿Te has quedado con dudas? Escríbenos y te ayudamos en lo que necesites. 

Cuéntanos qué te ha parecido esta receta.


Turrón de chocolate con quinoa y frambuesas

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